Por Raquel Paredes Vera
La pandemia se ha llevado consigo personas, momentos, incontables horas y, sobre todo, esperanzas de un año que muchos consideraban como “el bueno”. Aunque también ha dejado aprendizajes, como vivir plenamente cada día, valorar el tiempo y las personas que aún siguen con nosotros, el cuestionamiento de hábitos que ahora dejan de serlo, cambios disruptivos en la vida de todos y la lectura de una nueva realidad.
Karen Aidé Rivera López, estudiante de Ciencias de la Comunicación, con especialidad en Periodismo, en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, aborda su visión del confinamiento en su texto Carta a Ana, escrito para el concurso literario universitario “Leer la nueva realidad”. Escribió a Ana Frank, contándole cómo ha vivido la cuarentena y lo mucho que leer su diario, así como la lectura en general, le han ayudado a mantenerse cuerda en el encierro.
Karen relata que fue a través de Facebook que vio una publicación en la página de Cultura UNAM, en septiembre. Era la convocatoria del concurso “Leer la nueva realidad”, un llamado a los jóvenes a compartir sus escritos relacionados con la pandemia y con las nuevas formas de leer en el confinamiento.
Recordó entonces El Diario de Ana Frank que leía en ese momento; el libro no sólo le había gustado, sino que fue uno de los que la inspiraron a hablar con alguien, por lo que se decidió a escribirle a ella. Esta carta después fue adecuada a los requisitos del concurso y enviada para participación.
Primer párrafo del texto "Carta a Ana":
“Querida Ana:
En esta cuarentena me he sentido como tú en más de una ocasión. Reconozco que para nada se comparan nuestros contextos, aunque de distintas formas, ambas pasamos el tiempo encerradas para salvar nuestras vidas”.
Para Karen, la pandemia era, en un principio, un encierro. Para ella como para los demás, significaba "decir adiós a todo (o a mucho): amigos, relaciones personales fuera de casa, hábitos, ir a la escuela o al trabajo", pero al mismo tiempo, una pausa para dedicarse a uno mismo, a la familia; un lapso para poder conocerse, saber qué nos gusta, qué queremos y quiénes somos”, al menos es lo que aprendió, dice, a conocerse y saber qué es lo que quiere, porque en ese proceso descubrió que le gusta el mundo editorial y los libros.
Uno de sus propósitos del 2020 era precisamente leer más y al no poder disfrutar de sus pasatiempos favoritos como ir a museos y estar con sus amigos ni pasar aproximadamente 4 horas diarias en el transporte público para trasladarse a la escuela, pudo dedicarse más a la lectura, pues afirma que “a muchos nos pasó que de pronto no sabíamos qué hacer y teníamos ansiedad”, y los libros fueron eso que la ayudó a sentirse mejor.
“La lectura es útil no sólo para entretenerse, sino para aprender muchas cosas... ayuda a desarrollar la imaginación y nos hace pensar más en lo que hacemos. Y especialmente en el contexto de la pandemia es muy importante, porque nos deja imaginar otros contextos diferentes a los que estamos viviendo. No digo que sea para evadir la realidad precisamente, sino para tener acceso a otras que pueden ser diferentes y más interesantes”, menciona Karen. Al respecto, ella recupera una cita de uno de los autores que más le gustan, Michael Ende:
“La fantasía no es una forma de evadirse de la realidad, sino un modo más agradable de acercarse a ella”.
Al ser merecedora del primer lugar en la categoría de Licenciatura y Posgrado, obtuvo un premio de tres mil pesos, así como un paquete de libros de la UNAM, una publicación en la revista digital Punto en línea y una entrevista exclusiva para TV UNAM, pero para ella, más allá de eso, su recompensa fue aprender a sobrellevar todo lo que ha estado viviendo y a mejorar su confianza para participar en otros concursos: “de alguna forma me ayudó a creer que lo que escribo vale la pena ser leído”.
Esto le permite aconsejar a los jóvenes a integrarse a esos proyectos y demostrar que no es necesario pertenecer a las áreas de humanidades y artes, pues observó que un integrante del concurso pertenece al Instituto de Ciencias Nucleares. Para ella, es importante que existan certámenes como estos porque fomentan el hábito de la lectura, además de considerar que, a través de ella y la escritura, se puede ganar premios y al mismo tiempo, acercarse a ese mundo.
Karen además de su publicación de la Carta a Ana, realiza una colaboración permanente en un podcast llamado Bookcast, donde graba, con otra compañera, y en ocasiones con invitados especiales, dos episodios por mes sobre libros que reseñan y platican, proyecto que le agrada porque comparte con otros el mismo gusto por la lectura; además, es integrante de Mestizas de sangre malva, un canal de Youtube enfocado a hacer análisis de películas con perspectivas de género, que cuenta con una página de Instagram.
“En el futuro habrá muchos estudios del COVID 19, sobre la sociedad, el comportamiento de la gente en esta pandemia… el concurso se dedicó a recopilar escritos de gente joven sobre su experiencia con el coronavirus, que hoy es un punto de coyuntura, por ello, estos textos van a ser importantes, pues reflejan las diferentes perspectivas de cómo estábamos viviendo el encierro y cómo la lectura puede ayudar a que esto sea más llevadero”, apunta la joven galardonada, quien además de invitar a leer su texto recomienda la lectura de “Salvavidas” (de Tania Franco Ramos), que habla del papel de la lectura para salvar la vida en la cuarentena.
Ambos textos están disponibles en Punto en línea
Karen Rivera también te invita a conocer otros de sus trabajos:
Instagram: https://www.instagram.com/icenfire_/
Instagram Bookcast: https://www.instagram.com/b_ookcast/
Instagram Mestizas de sangre malva: https://www.instagram.com/mestizasmalva/
Canal de Youtube Mestizas de sangre malva: https://www.youtube.com/channel/UCkWeUDcoqVuLRqbhLT-Sp0w.
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