Por Aileen Albarrán
¿Has llegado a escuchar la frase: “¡Inocente palomita que te dejaste engañar!”? Comúnmente se suele decir el 28 de diciembre cuando se lleva a cabo la celebración del Día de los Santos Inocentes.
Pero ¿conocemos su origen? Por un lado, está la historia del cristianismo que tiene que ver con el Rey Herodes y el nacimiento de Jesús de Nazaret. Este día se usa para honrar la memoria de los niños asesinados durante el mandato de dicho rey, pues al tratar de evitar el nacimiento del futuro mesías, envió a sus soldados a matar a todos los menores de dos años que vivieran en Belén.
Según el Evangelio de San Mateo, Herodes I se enteró del nacimiento de un nuevo rey cuando unos magos de Oriente lo visitaron buscando el paradero del venidero mesías. Explicaron que, al ver una nueva estrella en el oriente, recordaron la antigua profecía sobre el nacimiento de un nuevo rey que regiría todas las naciones; “el rey de los judíos”.
Herodes el Grande fingió interés por el niño, ordenando a los magos que encontraran al menor y le informaran su paradero para adorarlo también. Los Magos de Oriente salieron guiados por la estrella hacia Belén, donde encontraron al Niño Jesús, pero sin informarle al Rey Herodes. Éste, al sentirse traicionado y temeroso de perder su poder, ordenó la matanza de todos los “santos inocentes” que habitaban la ciudad.
No obstante, varios investigadores señalan que no hay coincidencia entre las fechas, sumado a que el relato sólo se encuentra en un evangelio, poniendo en duda la veracidad de los hechos.
Por otro lado, las bromas y el carácter burlesco que se le atribuye a la fecha se relacionan con la llamada “fiesta de los locos”; antigua tradición de origen pagano y copiada por los cristianos, celebrada la última semana de diciembre en el periodo de la Edad Media.
La fiesta era un regocijo de sacrilegios, donde los jóvenes bebían, hacían cantos obscenos, jugaban bromas y parodiaban clérigos. El festejo llegó a Latinoamérica en los galeones de los conquistadores españoles, propagando la costumbre.
En la actualidad, en Hispanoamérica y España la fecha es una oportunidad para realizar bromas a personas con el fin de pasar un momento agradable y divertido. Por su parte, la iglesia cristiana conmemora la fecha con ofrendas a los Santos Inocentes.
En algunos países anglosajones y europeos tiene lugar una celebración similar llamada April’s Fools Day o Día de los tontos.
Aquí te dejamos una lista de algunas de las bromas más famosas en el mundo:
● En 1996, la agencia de noticias rusa Itar-Tass publicó una noticia donde se decía que el Parlamento ruso estaba debatiendo volver a conformar el bloque de países de Europa del Este que confrontó con la OTAN durante los años de la Guerra Fría. En países como Bulgaria o la República Checa, los habitantes reaccionaron aterrorizados.
● Hacia 1957, la BBC informaba que en Suiza, una familia de granjeros había conseguido cultivar fideos gracias a un árbol que podía hacer pasta. Muchos británicos llamaron a la cadena de noticias para preguntar cómo podían cultivar su propia pasta.
● En 1999, el conductor de radio de una estación local en Oregon reportaba el colapso de una represa a escasos kilómetros y la llegada inminente de una ola gigante que inundaría toda el área. Meses atrás, esa misma región había sido afectada por la crecida de un río, por lo que lejos de ser una broma, provocó pánico en cientos de residentes que comenzaron a autoevaluarse.
● En 2008 la BBC lanzó el tráiler de un supuesto documental que mostraba la vida de una nueva especie de ¡pingüinos voladores! nunca antes descubierta. “¿Pueden los pingüinos volar?” Fue de las preguntas más buscadas en ese año.
Debido a las condiciones que se enfrentan este 2020 a nivel mundial, quizá no sea el mejor momento para jugar bromas. Sin embargo, no falta quien esté en busca de un poco de diversión y haga caer a un pobre inocente, como a los profesionales de la educación, pues se publicó que recibirían un bono de 18 mil pesos por sus esfuerzos durante la pandemia, pero resultó ser una jugarreta del Día de los Inocentes.
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